Pierre Molinier

Pierre Molinier (Agen,1900). Su padre, Julien, es pintor de oficio. Realiza sus estudios primarios con los Hermanos de las Escuelas Cristianas. Se convierte en aprendiz de su padre e inicia sus clases de dibujo en la Escuela Municipal de Agen . En 1922 se instala en Burdeos como pintor de oficio. Se interesa entonces por la vida artística local. Expone por vez primera en el Salon des dessinateurs fantaistes indépendants(1927).

Entre estos “fantaistes” están: Max Jacob, Marie Laurencin y Francis Picabia. Miembro fundador y comisario del primer Salon des artistes indépendants bordelais. Su pintura evoluciona hacia el arte mágico y el erotismo. El reumatismo le impide trabajar durante casi un año.

En pintura, la mano y el espíritu se liberan; en el Salon des indépendants el tono sube cuando su obra Le Grand Combat – una pareja haciendo el amor, en palabras del pintor- es censurada. Él cubre su obra con un velo negro y sujeta con un imperdible una hoja con su protesta. Escándalo sin precedentes en Burdeos. En 1958 realiza su primer autorretrato fotográfico travestido. Participa en la encuesta realizada en el número 4 de Surréalisme, même sobre el strip-tease. Renuncia a su profesión de pintor de oficio para consagrarse a su obra pictórica y fotográfica. Se suicida el 3 de marzo de 1976. Deja sobre el sofá una hoja manuscrita con sus últimas voluntades y una despedida: “Estoy terriblemente harto de vivir y me doy voluntariamente la muerte. Lo que me hace reír. Abrazo de todo corazón a aquellos que amo”.

Como miembro fundacional de la generación pionera de artistas de la performance ―en la que se incluyen Bruce Nauman, Vito Acconci y Chris Burden―, Abramović ideó algunas de las primeras performances de la historia y es la única que continúa creando obras de relevancia.

Pierre Molinier, Tempus fugit…

Esta es la segunda exposición sobre Pierre Molinier que tiene lugar en España, después de la del IVAM de Valencia en 1999. Este curioso, extraño y provocador artista que es Molinier, suscitó en vida gran interés y fascinación en personajes tan fundamentales como André Breton. Después de su muerte, en 1976, se convierte poco a poco en un artista de culto, que anuncia la obra de artistas y fotógrafos interesados en explorar las partes más oscuras del cuerpo y de su percepción, en el sentido más libre, como Araki o Cindy Sherman. Molinier vivió y trabajó fuera de la moral, con una libertad y un coraje absolutos.

Pero siempre muy preocupado por la calidad técnica de su obra, que realizaba con medios caseros ingeniados por él. Todo lo hacía en los 25 metros cuadrados de su casa, tanto la escenificación de sus fotos como la realización técnica de las mismas. Todas los tirajes están hechos por él, a menudo conservan sus anotaciones al dorso. Siempre son contactos directos del negativo y las fotos más grandes corresponden al mayor tamaño del negativo con el que podía trabajar. Así, sesenta años después, las fotos no han perdido nada de su frescura, de su fantasía y, sobre todo, de su potente carga provocadora.

Guillermo de Osma

Ficha técnica:
Comisario:
Guillermo de Osma
Producción:
Ayuntamiento de Córdoba y Galería Guillermo de Osma